Dos poemas de Gary Snyder
Poesía Beat
Viernes 06 de octubre de 2017
Según Kenneth Rexroth, Snyder propone “una nueva ética, una nueva estética, [y] un nuevo estilo de vida”. Galardonado con el premio Pulitzer de poesía, su obra obedece a una inmersión budista en la espiritualidad y en la naturaleza. Uno de los autores del libro Poesía Beat, antología de Juan Arabia y Mariano Rolando Andrade publicada por Buenos Aires Poetry, que ya está disponible en la librería.
Por Juan Arabia y Mariano Rolando Andrade. Traducción de Juan Carlos Villavicencio.
Asociado a menudo no sólo con la Generación Beat sino también con los autores del Renacimiento en San Francisco, Gary Snyder es poeta, crítico y activista del medio ambiente.
Según Kenneth Rexroth, Snyder propone “una nueva ética, una nueva estética, [y] un nuevo estilo de vida”.
Galardonado con el premio Pulitzer de poesía, su obra obedece a una inmersión budista en la espiritualidad y en la naturaleza.
Traductor de literatura antigua inglesa y china, así como de poesía moderna japonesa, entre sus libros se destacan: Riprap and Cold Mountain Poems (1969), Regarding Wave (1969), Earth House Hold (1969), Turtle Island (1974) y A Place in Space (1995).
DISFRUTA DEL DÍA
Una mañana en lo alto del precipicio al este de Loowit
después del café en el campamento
mirando al joven y antiguo volcán
respirando vapor y azufre
lava al amanecer
cuencos de nieve
subí tras la cicuta de montaña
pregunté a mis viejos consejeros dónde yacían
¿qué está pasando?
dicen
“Nuevos amigos y queridos espíritus de los antiguos árboles
aquí estamos otra vez. Disfruta del día”.
ENJOY THE DAY
One morning on a ridgetop east of Loowit after
campstove coffee
looking at the youthful old volcano
breathing steam and sulfur
sunrise lava
bowls of snow
went up behind a mountain hemlock
asked my old advisors where they lay
what’s going on?
they say
“New friends and dear sweet old tree ghosts
here we are again. Enjoy the day.”
PIUTE CREEK
Un precipicio de granito
un árbol, sería suficiente,
o incluso una roca, un pequeño arroyo,
un trozo de corteza en un estanque.
Colina tras colina, plegadas y retorcidas
robustos árboles apilados
en delgadas fracturas de la piedra
una enorme luna sobre todo, es demasiado.
La mente vaga. Un millón
de veranos, el tranquilo aire nocturno y las tibias
rocas. El cielo sobre montañas interminables.
Toda la porquería que viene con el ser humano
disminuye, la roca firme ahora tiembla,
incluso el intenso presente parece obviar
este espejismo de corazón.
Libros y palabras
como el pequeño arroyo de una alta cornisa
desapareciendo en el aire seco.
Una mente clara, atenta,
sólo tiene sentido si
lo que ve es realmente visto.
Nadie ama a la piedra, pero aquí estamos.
Los fríos de la noche. Algo que se mueve
rápido a la luz de la luna
se desliza en la sombra del Enebro:
allí atrás invisibles
orgullosos ojos fríos
de un Puma o Coyote
me observan levantarme y partir.
PIUTE CREEK
One granite ridge
A tree, would be enough
Or even a rock, a small creek,
A bark shred in a pool.
Hill beyond hill, folded and twisted
Tough trees crammed
In thin stone fractures
A huge moon on it all, is too much.
The mind wanders. A million
Summers, night air still and the rocks
Warm. Sky over endless mountains.
All the junk that goes with being human
Drops away, hard rock wavers
Even the heavy present seems to fail
This bubble of a heart.
Words and books
Like a small creek off a high ledge
Gone in the dry air.
A clear, attentive mind
Has no meaning but that
Which sees is truly seen.
No one loves rock, yet we are here.
Night chills. A flick
In the moonlight
Slips into Juniper shadow:
Back there unseen
Cold proud eyes
Of Cougar or Coyote
Watch me rise and go.