Con cierre a cargo de Susana Villalba, vuelve la noche de poesía Filba
Filba Internacional 2022
Miércoles 28 de setiembre de 2022
Con entrada libre y gratuita, les esperamos para una gran noche: leerán Carlos Battilana, Mercedes Araujo, Martín Armada y la mexicana Clyo Mendoza, con cierre a cargo de Susana Villalba, Premio Nacional de Poesía.
Como otros años, la noche de poesía del Festival Filba Internacional será en la librería, en una tradición que ya contó con los recitados de Raúl Zurita, Fabián Casas, Mercedes Cebrián, Fabio Morábito o Liliana García Carril.
Así, el viernes 30 de septiembre a las 21hs. recibiremos, con entrada libre y gratuita, a la mexicana Clyo Mendoza y a los argentinos Carlos Battilana, Martín Armada y Mercedes Cebrián, en una velada cuyo cierre estará a cargo de Susana Villalba, Premio Nacional de Poesía. La curaduría estuvo a cargo de Valeria Tentoni, quien presentará a los participantes.
Para calentar motores, elegimos un poema breve de cada uno de los invitados:
Clyo Mendoza
Un poema de Silencio. Clyo Mendoza obtuvo el premio único de poesía en el Certamen Internacional de Literatura “Sor Juana Inés de la Cruz”, convocado por el Gobierno del Estado de México.
Cae en sí misma, cae fuera de sí misma, cae en el mar donde siempre es de noche. Ahí dentro los animales se llaman con nombres
propios y se escuchan los resortes del agua al vencerse. Se escucha
a la muerte, la única que sabe romper el músculo del mar y entrar
y salir del mundo.
Alarga sus manos para ubicarse. Aprieta puños. Se agita y se merma,
se hace habitar por pequeños seres, pequeños pájaros de la carroña
que volaron desde siempre alrededor de ella como partículas de
polvo, siempre pendientes, siempre ávidos.
Martín Armada
Tomado de La gran meseta, publicado después de los libros El estero, Ahab y Hombre sentado ahí. Más poemas de Martín Armada por acá.
El silencio es el cuero
que separa lo que es mío
de lo que nunca va a ser mío,
sencillo, claro es el silencio
las hojas no se mueven
no pasan autos.
Así empieza el futuro,
sin ruido.
Mercedes Araujo
Tomado de Así es el fuego, de la escritora mendocina también autora de libros de narrativa como La hija de la cabra o, el último, Botánica sentimental.
UNA MUJER Y UNA PERRA
corran bajo la luz
del sol tibio del invierno
todos diremos
el animal terrestre
más bello del barrio
cuando en travesía
las veamos pasar
es que el zarandeo
acompasado beneficia
la justa armonía de los lomos
y esas melenas reunidas
parecen
de un león bifronte
una negra manchada y cana
la otra rojo bermellón
como el cielo en la pampa
dos lobas
que avanzan al amparo
del montón de primos
y se reconocen
a la primera husmeada.
Esta perra tan vieja
no la reconocerías
-has llorado-
ni me oye ni salta ni ladra.
Es cierto, puede ser
que el ritmo de la marcha
cambie con los años
y las estrategias
se vuelvan lentas
los sueños breves
pero formar así
un par diverso
y andar mezcladas
una en otra
como se enreda
en la bondad la firmeza.
Corran bajo la luz
de la tarde del invierno
yo las miraré venir
tan idénticas: una
con ecuaciones en la cabeza
y otra, en el festejo cabal
de la carne cruda.
Corran que a todos nos gusta
esta vida mientras más
se parece
al canto de la sangre
cuando destella
bajo la luz dorada salten
los alambrados a ciegas
galopen
dos furias en una.
Carlos Battilana
Tomado de su libro La lengua de la llanura, que vino después de la antología Ramitas, su última obra reunida. Más poemas de Carlos Battilana por acá.
LECCIONES DE BOTÁNICA
Pequeñas hojas amarillas
caen
en los bordes del lago.
Pronto
el viento fuerte
del otoño
desmantelará
la inmensa gramilla
verde. La brisa
ahora
parece insignificante
pero es llamativa
su voluntad.
Susana Villalba
Tomado de La bestia ser, libro para el que obtuvo la Beca Guggenheim y que, una vez publicado, recibió el Premio Nacional de Poesía (2019). Más poemas de Susana Villalba por acá.
EL ÁRBOL (fragmento)
es la mañana
el acontecimiento
la candidez
de sólo ser
respiración
la liviandad
con que la mariposa danza
su momento
en el sol
lo que amás
te ata
me dijo el cielo
y aquí estoy
un perro me huele
ladra
da vueltas
a mi alrededor
aúlla, salta
quiere morder
mi inmovilidad
que no comprende
la soledad siempre
es con otro
en cada bifurcación
hago nacer el tiempo
para estar en el mundo
del perro
mi memoria es el viento
hasta en la altura
hay competencia
en lo quieto
pero también el amor
me dio esta forma
retorcida
la tormenta
y la sed de infinito
deslumbramiento