Cuando te levantas...
Miércoles 18 de febrero de 2009
Paul Eluard nació en Saint-Denis el 14 de diciembre de 1895 y murió por una angina de pecho el 18 de noviembre de 1952. Eluard era el apellido marterno: su verdadero nombre era Eugène Grindel. En 1917 se casó con Gala, quien más adelante lo abandonaría por Salvador Dalí provocando en el poeta una prologanda depresión. Comprometido políticamente, mantuvo una relación tormentosa con el Partido Comunista y fue miembro de la resistencia francesa durante la ocupación nazi. En su obra pueden identificarse diferentes etapas: la dadaísta, la surrealista (es considerado uno de los fundadores del movimiento), la comunista.
Paul Eluard en un poema:
Cuando te levantas...
Cuando te levantas el agua se despliega
Cuando te acuestas el agua se expande
Eres el agua desviada de sus abismos
Eres la tierra que echa raíces
Y sobre la cual todo se asienta
Produces burbujas de silencio en el desierto de los ruidos
Cantas himnos nocturnos en las cuerdas del arcoiris
Estás en todas partes suprimes todas las rutas
Sacrificas el tiempo
A la eterna juventud de la llama exacta
Que vela la naturaleza al reproducirla
Mujer tú engendras un cuerpo siempre igual
El tuyo
Tú eres la semejanza.
> Extraído de la bellísima Antología de la poesía surrealista, compilado por Aldo Pellegrini (Editorial Argonauta)
Paul Eluard nació en Saint-Denis el 14 de diciembre de 1895 y murió por una angina de pecho el 18 de noviembre de 1952. Eluard era el apellido marterno: su verdadero nombre era Eugène Grindel. En 1917 se casó con Gala, quien más adelante lo abandonaría por Salvador Dalí provocando en el poeta una prologanda depresión. Comprometido políticamente, mantuvo una relación tormentosa con el Partido Comunista y fue miembro de la resistencia francesa durante la ocupación nazi. En su obra pueden identificarse diferentes etapas: la dadaísta, la surrealista (es considerado uno de los fundadores del movimiento), la comunista.
Paul Eluard en un poema:
Cuando te levantas...
Cuando te levantas el agua se despliega
Cuando te acuestas el agua se expande
Eres el agua desviada de sus abismos
Eres la tierra que echa raíces
Y sobre la cual todo se asienta
Produces burbujas de silencio en el desierto de los ruidos
Cantas himnos nocturnos en las cuerdas del arcoiris
Estás en todas partes suprimes todas las rutas
Sacrificas el tiempo
A la eterna juventud de la llama exacta
Que vela la naturaleza al reproducirla
Mujer tú engendras un cuerpo siempre igual
El tuyo
Tú eres la semejanza.
> Extraído de la bellísima Antología de la poesía surrealista, compilado por Aldo Pellegrini (Editorial Argonauta)