El país devastado
Glauce Baldovin
Lunes 22 de agosto de 2016
Tercera entrega de la curaduría de la autora de La casa de la niebla: Glauce Baldovin, la cordobesa ganadora del Premio Casa de las Américas con obra inédita a la que le negaron el permiso de viajar a Cuba a recibirlo.
Por Elena Anníbali.
Glauce Baldovin nace en la ciudad de Río Cuarto en 1928 y muere en Córdoba en 1995. Fue integrante del Consejo de Redacción de la revista "Mediterránea", publicada desde 1952 a 1958 y co-directora de la revista "Vertical" entre 1951 y 1957, de Río Cuarto. Ocupó el cargo de secretaria de redacción de "Hoy en la cultura", publicada en Buenos Aires entre 1962 y 1966. Tuvo dos hijos, Sergio y Claudio. El primero fue "desaparecido" político entre 1976 y 1977 estando bajo bandera, es decir cumpliendo el servicio militar, experiencia clave en la vida de la autora. 1972 es la fecha en que Glauce obtiene el Premio Casa de las Américas por su libro La Militancia. Su casa es allanada, en ese tiempo, y por esa razón se le niega el certificado de buena conducta que la habilitaría a viajar a Cuba, por lo que nunca recibe el premio. Si se consulta el ganador de ese año, aparece, en vez de Glauce, el nombre de un boliviano Pedro Shimose con el título Quiero escribir pero me sale espuma, de clara adscripción vallejiana. Hasta 1985-86 su obra permanece inédita, así que representa una verdadera particularidad el hecho de que alguien con obra aún inédita que circulaba en manuscritos entre los amigos, sea galardonada con un premio tan importante. En esos años ella militaba en el Partido Revolucionario de los Trabajadores, y antes lo había hecho en el Partido Comunista.
De El asco
II
Muerto el hermano
la mitad del hijo crucificada
la otra mitad tierra ardida dragón encantado
mar sin riberas barco sin velamen
deberé soplar mis fuerzas por tanta ceniza acumulada
como si fueran carbones a encender
adormiladas brasas.
Al cruzar este territorio de imágenes imágenes imágenes
de palabras palabras más palabras
mis entrañas aún vivas se anudan en prolongada náusea:
es la necesidad del vómito
el asco.
III
Es espejo no devuelve mi rostro
sólo una calavera con víboras alacranes arañas fosforescentes saliendo de las hosquedades
y como cabellera un manojo de paja brava.
Bruja mortal lamía con las manos transformadas en garras
donde la flor se marchita
la papa me mira desde sus socavados ojos y llora
la sal la harina el arroz el azúcar se escurren por los dedos
caen como lluvia blanca espesa cargada de presagios
y hasta el sexo del amado que fuera en sus cuencas pez
colibrí lirio el fruto más preciado
se rinde aterido, interrogando.
Quién soy yo?
Quién es quién en el territorio del asco?
XII
El país devastado y los cuervos revoloteando en bandadas
alimentándose con el gorrión el colibrí la tórtola
los ojos de los niños deslindados que miran sin entender
o que a fuer de crueldad lo entienden todo:
la violencia
la prostitución
el hambre.
Se envenenan la leche el vino los huevos
hasta la gallina
la raíz del manzano las manzanas la mermelada
la mente el pensamiento
el deseo las fantasías.
Y las cigueñas despavoridas volando en demenciales espirales
no saben si dejar en la cesta del crío
o huir con el crío hacia otras galaxias.
XV
Los jóvenes.
Los oigo ladrar bramar aullar rugir el amor desgranado
deshojando como una enferma dalia seca de todo rocío
de una perdida lágrima.
Los oigo en himnos inaugurales dislocar las palabras
instaurando nuevos gritos
nuevas conmemoraciones.
Las palabras por tanto manipuleo han devenido infructuosas:
espejo que no refleja
lumbre que no alumbra.
Pues qué significan en el asco las palabras juramento
buenos días transparencia línea recta hermanos?
Los jóvenes ante el caos el precipicio
y yo sin poderles arrojar una cuerda para salvar el abismo
para que puedan desplegar las alas.
XX
Qué es el asco sino esta araña apocalíptica envolviéndonos en su tela tenebrosa
convirtiéndonos en los insectos que ciegamente devora?
Quiero cortar el tejido que me asfixia me ahorca
zafo
al instante un hilo como gruesa soga me rodea los brazos la cintura.
Toda la magnitud del cerebro toda la luz para luchar contra la tela oscura el pulpo
la hidra de noventaisiete cabezas invadiéndolo todo con su babasa inmunda
que renace y renace cada vez más grotesca más vigorosa.
y la impotencia para degollarla
para hundirle el puñal en la garganta y ver rodar sus cabezas
pisotear sus malditos ojos centelleantes.
Dónde el aire puro dónde la dulce lluvia
mi estrella entre todas las estrellas?
Dónde las bestias la pradera, el hombre
el sol radiante de enero?
Dónde enero abril octubre?
El tiempo se ha detenido
la naturaleza se desgrana con horror
nos abandona en la palabra nunca.
Sólo resta la voluntad de vivir
de comenzar otra vez.
Resucitar el brío perdido
el heroísmo
la porfía
la bienaventurada locura.
De Libro de la soledad
XIII
Todos se fueron yendo.
Cada uno a su turno. A su tiempo.
Pero nadie se llevó la primera palabra que digo al amanecer
cuando abro la ventana
y el primer rayo de sol me tiñe el rostro de ámbar,
nadie se llevó la última palabra del crepúsculo:
el silencio.
XIV
¿Y si alguien llegara?
Pregúntate.
Si alguien llegara a nuestra casa
y golpeara la puerta?
Si alguien
cuyo rostro vimos alguna vez en una antigua estampa
viniera a rescatarme de ti,
a rescatarte?
Qué haríamos?
Correríamos abrazadas a escondernos dentro del baúl
o te arrojarías
me arrojarías a sus brazos?
Libros publicados
1987- Poemas (Libro de Lucía, El fuego, El combatiente)
1989- Libro de la soledad
1991- De los poetas
1993- Libro del amor
1994- Con los gatos el Silencio
1995- Nuestra casa en el tercer mundo
1996- Poemas crueles (De la violencia, el terror y el despojo-El ángel aherrojado
2011- el sello editorial Las Nuestras (que se desprende de la Secretaría de Inclusión Social, la Secretaría de Cultura y el Consejo Provincial de la Mujer) saca Y sin embargo el sol, Confesión-Clamor por la intimidad, La fotografía, Del amor, Paloma pantera, De lluvias, Tercer Milenio, Arte poética (fechado en 1985)