Siete secretos de escritura de Patricia Highsmith
Foto de Ruth Bernhard - Trustees of Princeton University.
Viernes 16 de febrero de 2024
Se publican los diarios y cuadernos de la autora estadounidense, escritos entre 1941 y 1955, quien mantuvo un aura de secretismo sobre su vida privada. De allí tomamos los siguientes subrayados.
Por Patricia Highsmith. Traducción de Eduardo Iriarte.
“¿Por qué trabajo tan duro en un libro que sin duda me arruinará?”, escribió una joven Patricia Higsmith hacia 1950. Editorial Anagrama lanzó este año uno de los libros más esperados: los demoledores diarios y cuadernos de una escritora que en vida fue muy celosa de su intimidad. “Highsmith es demoledora consigo misma y con todo lo que la rodea”, advierte Dwight Garner después de leerlos.
Patricia Highsmith (1921-1995) es una de las escritoras más originales y perturbadoras de la narrativa contemporánea, autora de novelas como Extraños en un tren, El cuchillo, Carol, El talento de Mr. Ripley (Premio Edgar Allan Poe y Gran Premio de la Literatura Policíaca), La celda de cristal y El juego del escondite, y de libros de relatos como Pequeños cuentos misóginos, Crímenes bestiales, Sirenas en el campo de golf, Catástrofes, Los cadáveres exquisitos, Pájaros a punto de volar y Una afición peligrosa.
Entre sus reflexiones amorosas, sus viajes, sus temores, sus mudanzas, sus placeres y neurosis encontramos no pocos apuntes acerca de la experiencia de escribir libros. A continuación, siete subrayados para guardar.
“Cuando el intelecto está en paz con el corazón, una debería levantarse de la cama por la mañana temprano y escribir (crear) con los sueños de la noche todavía en la cabeza cual espectros de humo, antes de haberlos ahuyentado a todos con la primera palabra a otro ser humano”. 30/4/51
“Una advertencia a los escritores más jóvenes, que creen que los escritores mayores como yo son tan famosos y tan distintos. No somos distintos en absoluto, somos igual que otros escritores, solo que trabajamos más duro”. 10/9/62
“El arte no se hace blandiendo o afilando un hacha”. 9/5/63
“Cuando escribo un libro, ¡qué a menudo olvido que estuve preocupada por otros libros! Ahora que voy por la página 207, me preocupo: cuatro días de parón y falta de confianza en mí misma. (…) No acabo de decidir si dejarlo reposar un par de semanas, o usar el cerebro, cosa que rara vez hago, para volver a encarrilarme.” 24/5/63
“En cualquier trabajo creativo, si uno se para a considerar su valor o el tiempo que conlleva, se esfuma toda la alegría que da el trabajo”. 26/5/66
“Como novelista, puedo decir –o me gustaría declarar aquí por lo menos- que el diccionario es el libro más entretenido que he leído”. 5/6/71
“Lo que un escritor adora, y por qué, no puede expresarlo en palabras el escritor, del mismo modo que no podría explicar por qué está enamorado de una mujer que sus amigos consideran despreciable. Además, el escritor no desea explicar ese misterio”. 21/12/79