Nueve preguntas a Josefina Bianchi
Cuestionario fijo
Martes 24 de diciembre de 2019
La autora de Enredadera rusa (Caleta Olivia) comparte su biblioteca y la música funcional de su cabeza.
1. ¿Cuál es el objeto más antiguo que conservás?
Una foto de mi abuela a los 20 años, en la que posa como actriz famosa. Arriba le escribió en tinta a su hermana: “Parezco un ratón, no te parece? Con amor, Elise”.
2. ¿Qué libro de otro autor produjo en vos el efecto que te gustaría producir en quienes te leen?
“Abecedario” de Inger Christensen, por el trabajo lúdico y de estructura que parece no haber coartado la libertad en las imágenes y los versos.
3. ¿Lo mejor y lo peor que te dio la literatura?
Lo mejor: mis amigas, lo pausado y la posibilidad de habitar un mundo aparte.
Lo peor: la presión que me produzco a mí misma, la necesidad de lo instantáneo y la sensación de estar llegando tarde a todo.
4. ¿Cuál es el libro que más regalaste y por qué?
“Zoo o cartas de no amor”, de Shklovski, porque los prefacios funcionarían incluso como libro aparte, porque es lectura y ejercicio para hablar de lo que uno cree conocer pero no vio en la vida y porque es tan dramático que me da risa.
5. ¿Como qué disco suena la música funcional de tu cabeza?
En este momento es una mezcla ridícula entre “Kiss me, kiss me, kiss me” de The Cure y “Súper sangre joven” de El Duki.
6. ¿Cuál fue el color más hermoso que viste en tu vida y dónde aparecía?
El de las chispas sobre las calizas en las sierras de Córdoba. Siempre es lo mismo: chocar las piedras, ver el contraste y después olerlas.
7. ¿Con qué escritor o escritora que ya no pisa el mundo de los vivos quisieras tomar un taller literario?
Con Susan Sontag, aunque creo que estoy pensando en conversaciones y en lo literario como añadidura.
8. Un libro que hayas prestado y no te devolvieron.
“Zoo o cartas de no amor” de Shklovski, ¿quién lo tiene?
9. ¿Cómo ordenás tu biblioteca? ¿Nos mandás una foto?
En teoría: ensayo, narrativa, correspondencia, poesía e ilustrados. En la práctica, los ilustrados se filtran por todos lados, igual que la poesía.