_{Por Valeria Tentoni.}

En estas vacaciones de invierno, la biblioteca para las chicas y los chicos de la casa podría expandirse: hoy preparamos una lista de libros recomendados de todo tipo, con distintas propuestas de circulación por las historias y con amplio espectro en cuanto a las edades de quienes los reciban.

En la librería contamos con varios ejemplares de cada uno, pero además cabe recordar que estamos en temporada de Feria del Libro Infantil y Juvenil, y también allí pueden buscarse. Con entrada gratuita y en tres sedes, este año promete tanto como los anteriores. Habrá stands y eventos en el Centro Cultural Kirchner, en Tecnópolis y en el Centro Cultural Pasaje Dardo Rocha, del 7 al 29 de julio. La agenda completa puede consultarse aquí.

Mientras tanto, y tal y como prometimos, acá va la lista de sugerencias invernales del rincón LIJ de Eterna Cadencia:

Dos libros oceánicos

Pocas cosas tan espectaculares, cuando de libros se trata, que los pop-up. Los ejemplares desplegables ya existían en el Siglo XIII y, de hecho, se llamaban también "libros sorpresa". Aparentemente, fue la editorial Blue Ribbon la que estableció el término en inglés con el que hoy los conocemos. Para esta selección invernal elegimos uno muy especial: Océano, de Anouk Boisrobert y Louis Rigaud, que llega a Argentina vía Libros del zorro rojo.

Impreso con tintas de soja y sobre papel de bosques sostenibles, este libro es respetuoso de la naturaleza también en su contenido. Con enorme belleza y doble sistema de relieves por página, narra la historia de una expedición por las aguas en busca de un mar "transparente y vibrante". Pero antes de alcanzar ese destino, el buque rojo se encontrará con incontables interrupciones en la vida marina.  

Aquario es el primer "libro mudo" o "silencioso" de la argentina Cynthia Alonso, y fue publicado por V&R Editoras aquí, primero por Orfeu Negro en 2017. Podría agregarse a la lista de "libros mudos con mucho para decir" que les dejamos antes por acá. Las preciosas ilustraciones de este tomo fueron seleccionadas y exhibidas en a Feria de Libros Infantiles de Bologna, Italia, y también en el Museo Otani de Japón.

Al igual que el anterior, también su historia ofrece una reflexión profunda y ajustada al registro de los destinatarios acerca de la naturaleza marina y del respeto que se le adeuda. Encontramos a la niña que la protagoniza y al pez que conoce en el agua en una breve trama de enorme gracia, que se resuelve -al igual que el anterior- sin golpes bajos ni moralejas simplificadoras.   

Un libro para salir o volver de los museos

El museo de Tronquito, escrito e ilustrado por Ashild Kanstad Johnsen y publicado por Nórdica, es una excelente compañía para un plan más completo con las niñas y los niños de los alrededores. En esa historia, llena de detalles dispuestos en las gamas de los verdes y marrones, un presonaje llamado Tronquito pasa de coleccionista a fundador de un museo de chucherías que recuerdan al poema de María Elena Walsh, "En una cajita de fósforos". Hermana de ese gusto infantil tan conocido por la acumulación, la historia sigue con el consejo de una abuela que le sugiere convertir todos sus botines en una gran muestra para el pueblo. El museo de Tronquito es, también, una historia acerca de la posesión y del desapego. 

El resultado recuerda a una visita al Museo de Ciencias Naturales que está en Parque Centenario, en Buenos Aires, y que ofrece colecciones de piedras, bichos, plantas, pájaros y hasta ¡dinosaurios! Así que el libro puede combinarse alegremente con una visita tan alucinante como esa. 

Dos libros para esquivar zoológicos

Otro acierto de Pípala es este libro extraordinario, Profesión: Cocodrilo, absolutamente recomendabe. Sus autoras, Giovanna Zoboli yMariachiara Di Giorgio se las ingenian para contar la doble vida de un animal "ciudadanizado", que toma trenes y subterráneos, cruza calles y entra a negocios antes de llegar a su puesto de trabajo. El final es sorprendente y perfecto, y las ilustraciones imprimen un personaje adorable en la imaginación de quienes lo sigan por las veredas. Preguntas acerca de lo que la libertad significa verdaderamente en las ciudades se disparan en cada semáforo.

Otra sugerencia posible en esta lista es Animales escondidos, de Lola Casas y Gusti, publicado por Pequeño editor. En letra imprenta, para lectores iniciales, y con hojas de cartón, su resistencia y durabilidad también se revela en los recursos de escritura: la siempre vigente y cantante rima, colada en adivinanzas al modo de los Palitos de la selva. El despliegue gráfico, además, recuerda por su paleta, por sus formas, por sus sombreados y por su manera de ocupar la hoja a la magia alucinada de Xul Solar.