1. ¿Cuál es el objeto más antiguo que conservás?

Tengo algunos objetos que vienen heredados por desconocidos y que adquirí en ferias, muchos otros que adoro eran de mi abuela o algunos que vienen desde la infancia. En un estante de la cocina, por ejemplo, tengo dos muñecos diminutos (¨los basurita¨) que existen desde niña y entre tantos movimientos de casas a lo largo del tiempo nunca perdí y se convirtieron en una especie de santos y superhéroes para las mudanzas.

2. ¿Qué libro de otro autor produjo en vos el efecto que te gustaría producir en quienes te leen?  

Recién leo El ángel de la guarda de Fleur Jaeggy y salté a una nueva órbita. Tiene una ecualización hermosa entre el gesto de escritura y el relato que se desprende desde ahí. Algo de ese desparpajo me hace pensar en cosas que me estimulan, un empuje al deseo de más lectura, más escritura.

3. ¿Lo mejor y lo peor que te dio la literatura?

Lo mejor que me dio son las conversaciones. Algo de lo peor tiene que ver con todo lo que dudo cuando escribo.

4. ¿Cuál es el libro que más regalaste y por qué?

Un náufrago jamás se seca de Fabio Morábito lo compré mucho para un depósito personal y así tener a mano ejemplares para regalar con o sin excusa. Me pasa con algunos libros que quiero tener dos del mismo.

5. ¿Como qué disco suena la música funcional de tu cabeza?

La ciencia de los inútiles del Trío Omar Rodríguez López, me lo había pasado un amigo y se quedó para mí.

6. ¿Cuál fue el color más hermoso que viste en tu vida y dónde aparecía?

 Cuando en una noche lluviosa el reflejo de las luces del semáforo choca contra la ventanilla de un auto. Es un color que me hace pensar en las piedras y en las texturas que me ofrece la bendita miopía.

7. ¿Con qué escritor o escritora que ya no pisa el mundo de los vivos quisieras tomar un taller literario?

Quisiera que Mery Shelly me hable, sentarnos en una mesa y tachar frases.

8. Un libro que hayas prestado y no te devolvieron.

 Breve entrevistas a hombres repulsivos de David Foster Wallace. Me gusta que lo tenga esa persona, por eso aunque no era la idea, internamente ya se lo regalé.

9. ¿Cómo ordenás tu biblioteca? ¿Nos mandás una foto?

 Desde que hicimos la biblioteca compartida en estantes sobre la pared blanca del living intentamos llevar adelante un orden -teatro, ensayo, poesía, narrativa- ubicados en zonas bastante borrosas y cuestionables. El día a día hace que los libros se muevan como tentáculos por la madera, seguir el rastro de regreso se convierte en una dificultad a prescindir.